martes, 22 de diciembre de 2020

Día 279 al 287: las últimas cosas

En este país en este mundo
ya se piensa en las cosas 
que haremos por última vez.
Somos una máquina de absorber.
Una vida de tragar.

Una muestra gratis resumida
de todo lo que nos gusta.
Una carta de despedida que se escribe a diario.

El último eslabón de la cadena
ya cuelga de tu cuello
y no dejás que se enfríe la sopa.

Todo lo que compré
en estos meses para mí
fue un camisón:
por si me internan.

Riego las plantas todos los días,
no soportarían que me fuera.
No soportaría yo
que ellas no se repongan del sol.

Y, por las dudas, si un día no volvés,
o yo no vuelvo, ya sabés:
te encargo mis pájaros -les gusta que los miren-
me encargo de tus abrazos -los llevo siempre puestos-

Y en el árbol de navidad que no tenemos
cuelga este amor, mi regalo, como un vampiro con sed.








domingo, 13 de diciembre de 2020

Día 263 al 278: una conversación

 Qué dirías, Mariela, si te contara que estamos en la mitad de diciembre
 y aún seguimos con la muerte en los talones? 
Qué dirías si te dijera que todavía sigo aquí, y Julián y los míos también.
Que los tuyos siguen todavía aquí, que el mundo aún se parece un poco al que conocías.

Qué dirías si te contara que estamos a un paso de legalizar el aborto,
esta lucha que compartiriamos celebrando la vida, sí, la vida,
vos que fuiste siempre un ejemplo de lucha constante y sabías bien que,
como somos mujeres, nunca abandonaremos la idea de cambio,
porque atrás de ésta siguen muchas luchas todavía.

Qué dirías sobre la muerte de Maradona, sobre los titulares de los diarios,
sobre el presente político, la realidad capusottoneana que nos sobrevuela siempre.

Qué dirías de mis fotos, de todo lo que hice para no perderle el hilo a la vida,
para no darle el gusto a la tristeza de estar solos frente a este monstruo que no se ve
pero nos mira de frente para decirnos: no te hagas el boludo, ya te ví.

Qué dirías te esta película rusa de ciencia ficción en lo que se transformó la realidad.

Qué dirías de toda esta gente que ahora pulula en las calles como si nada,
abandonando el barco para inmortalizarse como idiotas.

Qué dirias si te contara que, como no nos vimos,
sigo pensando que estás cumpliendo la cuarentena responsablemente,
sigo esperando que programes ese encuentro tan postergado entre los cuatro.
Qué dirías ahora que, sabemos, Julián nunca conocerá tu casa,
ni festejará a la Nelly cuando lo interpele en la puerta.

Qué dirías de la página de Boris (al fin lo logramos, ja) y su aproximación al siglo 21.
Qué dirias de Vallejos, que parece haberse diluído junto con vos. 

Qué dirías, Mariela, de Trump y su caída bochornosa, de la escuela online,
de lo que dejó de funcionar y todo lo que empezó a funcionar de cero.

Qué dirías de todo lo que floreció en mi patio, de cada hoja, cada pájaro
que buscó guarecerse conmigo.

Qué me dirías, de los libros que hubieras leído durante este tiempo, 
de las charlas que hubiéramos inventado por chat.

Qué dirías, ahora que te sigo extrañando tanto, y que nunca respondí 
(porque era de noche y muy tarde) tu chat desde la clínica, donde me decías:
"los quiero mucho, chicos". 

Yo también, amiga, yo también.
Mucho.
Como todo lo que fue este 2020.

Mucho, muchísimo.Tanto.
Dale, es domingo, está gris, charlemos que, como dijo Carmen Martín Gaite, 
una conversación nunca se termina.
Mucho menos las nuestras.




viernes, 27 de noviembre de 2020

Día 257 a 263: dios la vida y la muerte.

Qué vale más:

Morir de amor o de Covid?
Vivir como un hombre o morir como un dios?
Obedecer o transgredir?
Callar o gritar hasta el fondo?

Guardarse para el final
o entregar todo al principio?
Criticar o entender?

Qué vale más:
Tus lágrimas o tus risas?
Tu patético durar o tu pronto partir?

Y Gelman que dice:
Hay quien vive como si fuera inmortal
otros se cuidan como si valieran la pena.






viernes, 20 de noviembre de 2020

Día 240 al 256: entreacto

Se llama al espacio entre un acto y otro acto de una obra.
Habrá otro acto en esta obra?

Más de 250 días y en el medio hubo:

-despedidas
-llanto
-fotos
-cine
-libros
-proyectos
-ausencias
-cumpleaños
-pájaros muchos pájaros
-risas
-tristezas
-amor
-añoranzas
-soledad.
-equilibrio.

Vale la pena hablar?
Vale la pena romper esta quietud?
Romperla con mis palabras?
Romperla conmigo?

Pocas cosas valen la pena, dice en su libro la gran Patricia Severín.




martes, 3 de noviembre de 2020

Día 230 al 239: Trouble every day

Trouble every day, se llama una película de Claire Denis que debería estar
en la lista de imprescindibles.

Uno de los mejores títulos para contar una historia de canibalismo.

Esto ya lo había contado alguna vez por aquí.

Se me vino a la mente, como esas migajas de sueño que todavía circulan
por tus ojos antes de desvelarte del todo.

Se repiten los pensamientos como se repiten los días?
Se repiten los días?
















Foto: Brooke Shaden

domingo, 25 de octubre de 2020

Día 227 al 230: Aniara

Como todas las noches, antes de dormir, con Julián miramos alguna serie
o,  si es temprano, (cosa muy poco probable) una película.
Ambos amamos el cine de ciencia ficción y aunque nos sentimos decepcionados
muchas veces, siempre insistimos con el tema, porque el amor es así. 

Anoche miramos Aniara, una película sueca de 2018, basada (leo aquí) en
el poema épico del nobel Harry Martinson.
No sé todavía si me gustó o no, es de esas obras en las que el tiempo te revela
finalmente si algo decanta de ella en vos.
Pero sí estoy segura que me devastó, con un dolor infinitamente lento.


Voy a hacer uso del copypaste de esta reseña de Guilherme de Alencar Pinto:

Aniara reemplaza la angustia de la Tercera Guerra Mundial por la ecológica:

diversas catástrofes climáticas hicieron de la Tierra un lugar difícil o imposible
de vivir, y por eso la gente se está desplazando a Marte. Aniara es una especie
de crucero espacial con capacidad para cientos o miles de personas
que hace el traslado a Marte en tres semanas,
durante las cuales los pasajeros pueden disfrutar de atractivos diversos:
restaurantes, bares,fiestas, piscina, gimnasio, deportes, y hasta una sala especial
dominada por una entidad de inteligencia artificial llamada Mima,
que tiene la capacidad de leer las memorias de los presentes y propiciarles visiones
agradables de acuerdo a lo que infiere de la mente de cada uno.
La protagonista, de quien no conocemos el nombre, es la funcionaria
que recibe y orientalos clientes de Mima.

La nave sufre un accidente (se choca con un escombro espacial), se desvía y, al estar
irremediablemente dañado su centro de combustible, ya no es posible maniobrarla.
Es decir, Aniara rumbea en forma 
indefectible hacia afuera del Sistema Solar.
Esta es una excelente premisa para una película de aventura, de héroes usando todo
su ingenio para lograr objetivos casi imposibles, a la manera de Gravedad
(2013, de Alfonso Cuarón) u Operación rescate (2015, de Ridley Scott).
Pero Aniara es lo opuesto y tiene una dinámica muy particular: cada solución
que se propone, cada esperanza o cada propósito quedan sencillamente en la nada.
Y aunque la nave es autosustentable y tiene un vivero de algas suficiente como
para renovar el oxígeno y alimentar a sus pasajeros en forma indefinida,
y aunque los pasajeros son suficientes como para generar la vivencia de una
pequeña ciudad, la mera falta de un proyecto alcanzable va minando
paulatinamente los ánimos.
El desaliento sostenido e irreversible puede ser más triste y más corrosivo
que una desgracia aguda pero localizada.

No podría agregar yo más nada. Solamente esta sensación de entender que cada
uno se siente preso de donde sea.
Un cuarto, una casa, una relación, una ciudad,una pandemia.
Un planeta que no va a ninguna parte
no es más que una jaula inmensa y corrosiva.




 

miércoles, 21 de octubre de 2020

jueves, 15 de octubre de 2020

Día 215 al 220: recordar

Ayer, hablando con Carla, me tiró, como si me contara algo superfluo,
que en este período pandémico lo que no estamos haciendo es fabricar recuerdos. 

Todos los días parece el gran largo día y qué decantará, al final de todos,
qué sedimento quedará con el lujo de los detalles?

El recuerdo se fabrica.
No recordamos los días vacíos, ni la bucólica corrida del reloj hacia ninguna parte.
Recordamos lo que circula, lo que diferencia, lo que salta de lo ordinario.
Recordamos lo que rescatamos.

El resto se diluye como polvo en la gran laguna turbia y voraz del olvido.




.





viernes, 9 de octubre de 2020

Día 214, casi 215: la noche

La noche destiñe palabras
las suelta
como pensamientos líquidos
sin forma.

Caen desde los árboles
se deslizan por los vidrios
que espeja el televisor.

Reptan por las piernas
dicen nuestros nombres
pero no somos los mismos.

Apenas el borde 
de un pan crudo,
un cielo de celofán
una huella de barro
en la alfombra nueva.

Un viernes
intercambiable como vos
como yo.

Pienso en Emily Dickinson
y también, como ella, 
prefiero ser amada.







Día 206 al 214: la lista

214 días mirando a la muerte para cuidar la vida.

214 días sobreviviendo, reptando, arañando las paredes, las puertas, las sábanas.

Viviendo para adentro, con una sed de vida que, creo, sólo tuvimos al nacer.

Pero miramos la muerte.

O mejor, ella nos mira de frente.

Y así se fueron muchos.

Así se fue Mariela, mi jefe Eduardo, tantos otros conocidos, familia, músicos, artistas.

Así se fue el estudio y el jardín Botánico y el río.

Los amigos que ahora sólo son un avatar, los chats que devuelven todo 

menos el abrazo.

Una larga lista, como un remito en la oficina central.

Así la vida hecha cine, hecha trizas, pelusas de una gran trama.

Todo cambia.
Todo, espero, recambie.

Hasta la gata ha cambiado su nombre, ahora se llama Graciela Borges.





miércoles, 30 de septiembre de 2020

Día 202 al 205: saber

Cada primavera siento que el mundo se rehace,
borra el proyecto anterior
y carga uno nuevo.
Será así hasta que salga, me digo.

Cómo saber si estamos en el final de un mundo
o el comienzo de otro?
El momento exacto del tiempo.
Cómo saber?

Ayer fui de mi tía, le llevé el texto escrito en su nombre.
Quiero decir las cosas que importan.
No quiero decirlas después del tiempo.

Vimos flores, pájaros, sombras de sol en el piso.
Hablamos con palabras verdes de patio.
Al final de la tarde, cuando me volvía
le dije, como en un secreto:
dentro del tupper hay una cartita para vos.
Le dije, como si fuera la última vez mía en el mundo.
Porque yo no lo sé, quién lo sabe,
cuándo viene lo último o lo primero.







sábado, 26 de septiembre de 2020

Día 188 al 201: in visible

Y, si de pronto
me volviera
invisible como los días?

Un paisaje más
afuera
de una ventana cerrada?.

Incolora, aséptica.
Bien lejos
de todo corazón que manche.




martes, 22 de septiembre de 2020

Día: 182 al 187: en blanco

A veces es mejor el blanco.
el hueco el escondite
el agujerito para que pase la araña
sin hacer más ruido
que un soplido en la oreja
mientras vos dormís.



miércoles, 16 de septiembre de 2020

Día 180 181: símbolos.

Después del 2000, los Blackberry fueron unos.
Luego más cerca del 2014 las Cafeteras Express.
Resulta ser que ahora son las mopas o los termos Stanley.

Los objetos que te definen, que te anotan en la lista.
De ser, de parecer. (Al fin de cuentas, parecer hoy es ser).
La homogeneidad del paisaje es el paisaje.
.
El rock, ya lo sé, lo sé bien, ha muerto hace rato.

Lo único que podés todavia elegir
es la cuerda que mejor te combina con el bozal.



lunes, 14 de septiembre de 2020

Día 176 |177 178 179: trouble every day

Look into my eyes
You see trouble every day
It's on the inside of me
So don't try to understand
I get on the inside of you
You can blow it all away
Such a slightest breath
And I know who I am
Look into my eyes
Hear the words I can't say
Words that defy
And they scream it out loud
I get on the inside of you
You can wave it all away
Such a slightest thing
It's just the raise of your hand
And there's trouble every day
There's trouble every day
There's trouble every day
There's trouble every day
If I want you back
I could get away
Before the sunshine leaves your eye
But I need to know
How to find a place
Before the days become nights
Before the years become lies
And there's trouble every day
You know that I love again
Please make it start again
There's trouble every day.

Tinderstick lo dice mucho mejor que ellos,
mucho mejor que yo.



jueves, 10 de septiembre de 2020

Día 175: mensajes

Hoy me pasó algo muy peculiar.

Me encontraba limpiando el baño, más precisamente la ducha, tratando de sacar
los cabellos que las mujeres de esta casa vamos pegando, sin querer, sobre los azulejos
al bañarnos, cuando en una milésima de segundo antes de sacarlos con el paño,
veo algo insólito.

Duró lo que dura un pestañeo, pues el trapo, inmediatamente abocado a la costumbre, 
no hizo nada por dejar evidencia.

En la pared blanca, escrito con cabello, leí la palabra PUTO.

( Recién también, en un capricho del sol, la bella Lucrezia Panchiatichi que ilustra mi 
Condesa Sangrienta, me mira así, certificándome)



























miércoles, 9 de septiembre de 2020

Día 174: el lugar

Todo arde.

Seguir adelante arde.
Dejar algo atrás arde.
Olvidarse arde.
Discutir arde.
Aceptar arde.
Reclamar arde.

Pero más tarde o más temprano 
nos damos cuenta
que el lugar es intercambiable.

Somos figuritas
ardiendo y haciendo arder
estúpidamente,
porque el fuego, finalmente, lo quema todo.
Esta orilla
y la otra también.






martes, 8 de septiembre de 2020

Día 171 172 173: humo

Esta manía de decir una y otra vez
las mismas palabras los mismos silencios


la estela de un avión parte el cielo en dos mitades
que siempre
    se vuelven
                a unir.





sábado, 5 de septiembre de 2020

Día 167 168 169 170: un sábado cualquiera

Ya no importará tocar?


Nos conformaremos con
         los ojos, la ilusión, la pantalla?
Una voz salida de parlante
un vestuario desvestido
un abrazo en bytes

Ya no importará lo íntimo
        lo sensual lo primitivo lo fugaz?

Seremos como peces hundidos 
en un infinito número gris?

Pero ahora entonces
       ya no nos importará tocar?







martes, 1 de septiembre de 2020

Día 165 166: tema composición: mi tía

Hoy quiero hablar de mi tía.
No hay un por qué, no es su cumpleaños, no ha partido,
no ha sido noticia por nada especial estos días.
Pero quiero hablar de ella.
De lo que es una infancia con tía.
Una adultez con tía.

Una tía que me hizo conocer a María Elena Walsh,
a Edgar Allan Poe,
los cuentos de vampiros,
el exquisito perfume de las rosas.

Una tía que me hacía sanguchitos al volver del colegio,
que me llevaba a tomar la merienda a las casas donde trabajaba.
Una tía que siempre me habló de libros, sapos, césped
con la misma pasión que pone al cocinar el mondongo.

La tía lobizona, como sospechábamos con mi amiga,
la de los ojos vidriosos, punzantes como espinas,
la que, seguro, sabe más de lo cuenta.

Con ella descubrí un mundo a lo Silvina Ocampo
sin haber leído a Silvina Ocampo.
Con ella descubrí que un jardín puede ser un castillo secreto
donde habitan más voces que silencios.
Que un colibrí te busca cuando tiene sed
y te llama cuando se inunda de abejas el bebedero.

Una tía que te habla de fanstasmas con la misma certeza
que te cuenta una noticia escuchada en la radio.

La que me sigue mimando con comidas deliciosas de tía
que sabe que hay un mundo de infancias que se continúa
siempre con el mundo adulterado de la adultez.
La que sigue comentándome las historias de los libros
con la misma avidez de aquella niña que leía bajo la cama.

La que sabe más que muchos y la que nadie tiene más que yo.

Además,
su nombre es de garganta golosa untada con pétalos:
Gladys.





domingo, 30 de agosto de 2020

Día 164: domingo

Para qué uno escribe?
Para qué uno fotografía?
Creo que uno escribe para olvidarse que va a morir.
Uno saca fotos para olvidarse que va a morir
y que lo que retrata también se va a morir,
más tarde o más temprano.

Es aterrador esperar la muerte sin hacer nada.

Es aterrador
la muerte, escribir, fotografiar, esperar.
El domingo.





sábado, 29 de agosto de 2020

Día 161 162: cabezas parlantes

Ya es una cosa tangible, una naranja entre tus manos.
Si no lo sabe, cante igual.
Una ficha en la ranura y el conocimiento es papa frita.
Si dos por dos no nos soluciona el mundo
el mundo se adptará a la forma del pensamiento.

Cabeza calculadora cabeza lenguaje cabeza motriz.
Si la herramienta es buena haremos todo lo posible
para hacer de ella un castigo.
Cabezas intercambiables, moldes, maceta, caja.
Frankestein brindando por el nuevo chip.

Yo, sólo le dejaría mi cabeza a Juan Carr.



jueves, 27 de agosto de 2020

Día 160: lo singular

Elon Musk mostrará, mañana viernes,  un dispositivo Neuralink operativo que
funcionará como conector entre el cerebro y la inteligencia artificial.

La máquina es, según la compañía, capaz de implantar seis hilos (192 electrodos)
por minuto y sin tocar los vasos sangúineos.
Toda la información recogida por los hilos se transmite a un dispositivo situado en
la cabeza, previsiblemente detrás o encima de la oreja. Dicho dispositivo tiene un
puerto USB que se puede conectar a una computadora para exportar dichos datos
para su posterior procesado o hacerlo en forma inalámbrica.
El científico y empresario aseguró que Neuralink permitirá escuchar música
directamente en el cerebro a través de un chip o controlar el nivel de hormonas
para usarlas en nuestro beneficio.

Yo sé que parecen buenas noticias.
Yo sé, incluso, que son buenas noticias.
Pero todo lo bueno también es malo según quién tenga el control.

Así es cómo ahora ya no será exclusividad de los medios de comunicación decirte
cómo pensar, alterar tu percepción y manipularte.
Ahora estarán dentro, literal y absolutamente.
Ellos serán tu cabeza.

Así es como se empieza.
Así es como se termina con el ser único, diferente, autónomo.
El principio del fín de una era:
la del ser singular.



miércoles, 26 de agosto de 2020

Día 156 157 158 159: avatar

Antes de esta pandemia, creía que lo que uno más extrañaba en la ausencia del otro
era su voz. La voz, que es lo primero que se olvida cuando alguien muere.

Pero ayer, en medio de mi cumpleaños, entendí que ahora extrañamos los rostros.
El llamado telefónico pasó a ser video llamada, encuentro online, meeting.

Será el rostro lo que olvidemos primero en este nuevo nivel del juego?

Será la sonrisa, la ilusión de estar cerca, el abrazo simulado que intenta competir
con el que te hacía temblar como una hoja?

Será este nuevo nivel del juego como este pájaro raro, negrísimo,
que recién gritaba desde el árbol para que mis ojos no llegaran a tiempo?

Los ojos, esta mirada incompleta, no son más que ojos de avatar
en una era desnuda, tibia, impalpable.




sábado, 22 de agosto de 2020

Día 155: el río

160 días que no veía el río.

160 días que no sentía el viento agrio del este.
160 días que no me dolían los músculos de tanto caminar.
160 días de tanto cielo tanto verde tanto aire.

En el medio, qué pasó con la vida?
Qué pasó con Mariela, con Eduardo, con Manuela, con el estudio en Capital?
Qué pasó con la música y las salidas fotográficas y los asados paternos
y los abrazos y los cumpleaños felices?

Qué pasó con la vida, vida mía,
que sigue latiendo en los mismos
otros cuerpos sin saber dónde seguimos,
sin saber si adelante
queda ahora atrás.




viernes, 21 de agosto de 2020

Día 150 151 152 153 154: Hipo

El trazo de estos días no deja estela.
Es un humito de frío persiguiendo inmortalidad.

Cosas vistas, cosas leídas, cosas escuchadas.
Y un comienzo de poema que me hizo sonreir:

"vos
cada dos segundos
porque la memoria
también tiene su propio hipo"

de Mercedes Romero Russo.




domingo, 16 de agosto de 2020

Día 144 a 149: recreo

Un espacio suspendido en este recreo de la vida.
Pasaron muchas cosas en el mientras: trabajo, muestras, vida.

Llamados para avisar que alguien importante está muriendo.
Llamados para avisar que a veces la vida no.

Alegrías se superponen con las tristezas y al revés
cuando pega es más fuerte.

Repienso:
cuando uno salva un pájaro
siempre se muere otro .





lunes, 10 de agosto de 2020

Día 142 143: tu isla

Te acordás de aquella consigna que decía:
-Si tuvieras que irte a una isla desierta, qué te llevarías?
Qué salvarías del incendio?

Tu celular, tu plazo fijo, tus botas caras?
Tus fotos, tus libros, el anillo de bodas que dejabas en el cajón?
Un regalo especial, una carta escondida en un bolsillo?

246.499 argentinos contagiados. 4662 argentinos muertos.

Tu casa, esa isla, y vos:
Qué te llevaste, ahí, contigo?





sábado, 8 de agosto de 2020

Día 140 141: Obsesiones

Recordar es, cada vez más, no tanto recordar una historia sino ser capaz de evocar una imagen.
(...) Las narraciones pueden hacernos comprender. Las fotografías hacen algo más:
nos obsesionan.
Dice Susan Sontag en Ante el dolor de los demás, 2003.

Qué obsesión estará dibujando ahora la luz en el fondo del material sensible,
en el latido más visceral del ojo que, aún dormido, no puede parar de mirar?


jueves, 6 de agosto de 2020

Día 139: Donde se enganchan los ojos

La reja del ascensor tenía flores con cáliz dorado y follajes rizados de fierro negro, donde se enganchan los ojos cuando uno está triste viendo desenvolverse, hipnotizados por las grandes serpientes, los cables del ascensor.
Así comienza Cielo de claraboyas, de Silvina Ocampo.

Y dónde se enganchan tus ojos cuando están tristes?
En qué reja metafórica paseás la mirada hasta que el tiempo
se deshilacha en el aire y te queda poco más que nada.



miércoles, 5 de agosto de 2020

Día 137 138: contar

No debería uno contar nunca nada, ni dar datos ni aportar historias ni hacer
que la gente recuerde a seres que jamás han existido ni pisado la tierra o
cruzado el mundo, o que sí pasaron pero estaban ya medio a salvo en el tuerto
e inseguro olvido.

Contar es casi siempre un regalo, incluso cuando lleva e inyecta veneno el cuento,
también es un vínculo y otorgar confianza, y rara es la confianza que antes o después
no se traiciona, raro el vínculo que no se enreda o anuda, y así acaba apretando
y hay que tirar de navaja o filo para cortarlo.
Dice Javier Marías en "Tu rostro mañana".

También dice por ahí, al final de otro libro hermoso, "Así empieza lo malo" :
El pasado tiene un futuro con el que nunca contamos. 



lunes, 3 de agosto de 2020

Día 136: el infierno

Ayer ví, por primera vez, El infierno más temido,  de Raúl de La Torre,
basada en el cuento de Juan Carlos Onetti.

Hoy leí el cuento.

Cosas que no me habían pasado.
Cosas que no había pensado.
Cosas que tomarán la forma del infierno,
cada vez que yo les tema.



domingo, 2 de agosto de 2020

Día 134 135: silencio

Quisiera fotografiar,
como Cartier Bresson,
el silencio que le sigue
a la palabra.

Quisiera ser
ese silencio
en la conversación.

Quisiera más vida como ésta,
ahora que la tengo practicada.

Demorarme otra vez en ese abrazo
y que esta vez vos tampoco
me sueltes.





foto: Cole Thompson

viernes, 31 de julio de 2020

Día 132 133: río

Bien sé que
haciendo algo malo
se desata la tristeza
pero tambien se desata
haciendo lo bueno.

A veces las orillas son iguales.
No hay nada más que tristeza.

Y ahí, en el medio del puente,
mirás hacia abajo:
todo lo que ves es río.






miércoles, 29 de julio de 2020

martes, 28 de julio de 2020

Día 128 129 130: vida

La vida es diferente cuando la vives a cuando la cuentas después.
Dice el personaje de Amalric, Julien, en El cuarto azul.

También es distinta la vida cuando se la recuerda?




sábado, 25 de julio de 2020

Día 126 127: la casita

Esta sensación de haber armado, hace tiempo, el rompecabezas,
casi con los ojos cerrados, de memoria, sin fatiga, casi sin conciencia.

De repente, un viento de 127 días entra por la ventana y te revolea,
una a una, cada pieza.

Armarías de nuevo el juego de la misma manera?
Ahora, que arrancás de cero, construirías igual la casita?









jueves, 23 de julio de 2020

Día 124 125: analógico

Cuando escucho o leo a fotógrafos que dicen que prefieren la era analógica a la digital
mi pensamiento me lleva aquí:

Cuando la fotografía era analógica (y es que de ahí yo vengo también) hecha en casa por las propias manos, había en esa alquimia algo único, de exclusividad, magia para pocos, misterio para muchos. Algo de maternidad. Este dar a luz en soledad nocturna.
Un arte individual, selectivo, glamoroso.

Belleza, sí, pero siempre hay belleza en los ojos.

Ahora, cuando la fotografía es digital y este arte pasa a muchas manos en una democracia rápida y segura, resulta que ya no somos tan pocos los artífices.
Resulta que es un arte compartido, y no sucede bajo la luz roja de la noche sino en el ruido del día. Lo que se comparte se empieza a ir de las manos.
Lo que se comparte se reparte.

Y ahí estás, mirando cómo la belleza te noquea el ego.


martes, 21 de julio de 2020

Día 123 124: fase 4

Podemos salir a reconocer la vereda,
los olores de la calle, el perro de la esquina,
la li ber tad en cuotas.

Ahora sí que reviviremos
respirando el virus sin reja,
adorando volver a una vida
que ni siquiera te interesaba.

Si estamos condenados a rearmarnos,
te repetirías?





domingo, 19 de julio de 2020

Días 120 121 122: respuestas

Susana me invitó diciendo:
-Es una excursión de un día. Encontré el lugar perfecto para las dos.
Una playa en Francia donde es invierno y verano a la vez.
Mar para mí, que amo el calor, nieve para vos, que amás el frío.

Y, en tren, partimos para la playa.
Montañas de nieve cálida se mezclaban con los bañistas.
Avalanchas suaves, de repente sobresalían de las olas, se me venían encima
sopladas por el viento, acariciando fuerte pero suavemente la piel.
Como si fuera una gran caricia concentrada.

Nunca ví, ni en sueños, un lugar más hermoso.
Creo que, como nunca antes, sentí que podía ser lo último que viera
sobre la tierra y no me importaba.

Era lo mejor del universo concentrado en un pequeño espacio
cielo                                  nieve                                            mar

Como si todas las respuestas fueran sí.




jueves, 16 de julio de 2020

Día 118 119: pantallas


Ahora sabemos que aquello que, decíamos, quería matarte, hoy te viene a salvar
de una vida natural confinada.

Somos apenas un trozo de atún durmiendo en la lata.



martes, 14 de julio de 2020

Día 116 117: deterioro

Nosotros no percibimos el tiempo, escuché decir a una física.
Nosotros, dijo, apenas percibimos el deterioro de las cosas.
Y es así, y sólo así, como lo medimos en tiempo.


domingo, 12 de julio de 2020

Día 115: cerradura

Prefiero morir a perder la vida,
dijo el famoso cantautor Tonino Carotone.

Y la vida se esfumó por la cerradura,
esa misma
        que pusiste
            para protegerte.





sábado, 11 de julio de 2020

jueves, 9 de julio de 2020

Día 112: el odio

Si la consigna es reventar de odio en las calles, gracias,
yo me quedaré en aislamiento todo lo que dure esta vida.
Hay cosas en las que elijo no transformarme.

La sopa, sin mosca, por favor.





martes, 7 de julio de 2020

Día 109 110: palabras no

Todo el mundo sabe cómo sacar adelante
una vida una casa un amor un olvido un desaire

Todos tienen la fórmula mágica para ser felices
"ser tú mismo" y olvidarte del resto

Siempre uno primero y después el mundo
No vaya a ser que te creas parte del rebaño

Palabras vacías que ruedan por el aire hacen más ruido
que el cachetazo firme que te sorprende de culo en plena misa.



domingo, 5 de julio de 2020

Día 108: domingo

Un domingo no es más que un domingo.

Sin embargo, en mi cabeza van y vienen todos las formas del tiempo
mientras me las chupo en un mate casi frío.